Estas decisiones no convergen con la idea de feminismo que actualmente la sociedad siente interiorizada y aceptada. Sin embargo, precisamente esas decisiones y esas escenas machistas, desnudas y perturbadoras son las que más en sintonía se encuentran con la labor de criticar los abusos que se produjeron y el sexismo imperante. Son esas decisiones y escenas las que permiten al espectador dudar y reflexionar sobre lo que está viendo, sobre la veracidad de los hechos, sobre el origen de nuestras acciones y sobre lo monstruoso del poder.
Todos estos mensajes se concentran en su protagonista, Marilyn Monroe. Es presentada como un personaje pasivo de su propia vida, que parece tomar decisiones que no son escuchadas ni por ella misma, aunque en contadas ocasiones la propia cinta se contradice y muestra a una Marilyn más enérgica, agresiva, crítica y tenaz. Posiblemente, ese personaje tan pasivo no es una representación fiel a la realidad, pero esta decisión narrativa ayuda a meternos en su mente anárquica y a explicar sus muchos problemas, los cuales pueden haber sido derivados de la ausencia de figuras responsables en su vida que la guiaran.
La cinta no busca mostrar de manera exacta la realidad de la vida de Marilyn. Sin embargo, todos esos sentimientos que ella expresa y que a nosotros nos llegan sí podrían haber sido reales. Ese es el foco de atención de la película. Se requiere exaltar ciertos rasgos y profundizar por momentos en el terreno de lo onírico para poder tratar esos sentimientos tan complejos y confusos. A todo ello, se le suma el caos visual para intentar mostrar ese mundo interior convulso, como el paso de color a blanco y negro y de nuevo a color, al que intentamos darle un significado sin éxito alguno.
Sin embargo, dos aspectos de la película parecen ser criticados negativamente por numerosos espectadores. Estos aspectos, por motivo de spoilers, son tratados en esta otra entrada.
Asimismo, la cinta parece formar parte de un hilo conductor que el director empezó en The Assassination of Jesse James by the Coward Robert Ford (2007). Este hilo consiste en la desmitificación: de la idealización de nuestros ídolos y referentes en una y de la fama, del éxito y de un icono popular americano en esta otra.
Difícilmente una película puede contar la realidad tal y como fue. Eso nunca va a suceder. El cine trata de ir más allá, de transmitir, de reflexionar, de amar y de odiar, de ver y dejarte llevar, de sentir y, en este caso, de entender, como mínimo, una parte minúscula del infierno del personaje.
Comentarios
Publicar un comentario